La más destacada poetiza chilena y Premio Nobel de Literatura, nació un 7 de abril de 1889 en Vicuña. Este año además, se celebran los 80 años de la obtención del reconocimiento mundial. Años después de este galardón, Chile le otorgó el Premio Nacional de Literatura en 1951.
Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga, nacida en Vicuña, maestra de escuela rural, ha llegado a convertirse en una de las figuras más relevantes de la literatura universal.
Gabriela Mistral es una de las poetas más notables de la literatura chilena e hispanoamericana. Se la considera una de las principales referentes de la poesía femenina universal.
Su hermana Emelina Molina, fue la responsable de iniciarla en las letras. Su influencia resultó determinante en su decisión de dedicarse a la enseñanza, promoviendo un pensamiento pedagógico centrado en el desarrollo y la protección de los niños.
A finales de la década de 1930 círculos literarios de distintos países comenzaron a promover a Gabriela Mistral para el Premio Nobel de Literatura. Fue el Presidente Pedro Aguirre Cerda y la escritora ecuatoriana Adelaida Velasco Galdós, quienes se mostraron interesados en respaldar su candidatura a través de la traducción de sus obras.
Gabriela Mistral recibió muchos reconocimientos a lo largo de su vida. En 1914 había sido galardonada con el máximo premio de los Juegos Florales. También recibió premios por parte de instituciones y gobernantes. El 15 de septiembre de 1925 fue declarada «Hija Predilecta de Vicuña», su ciudad natal. Y en 1951 obtuvo el mayor galardón en Chile en el ámbito de las letras: el Premio Nacional de Literatura.
Sin embargo, el reconocimiento más relevante por su alcance mundial fue el Premio Nobel de Literatura, el que le fue conferido en 1945 luego de una campaña internacional que la respaldaba desde la década de 1930. Nunca antes el galardón había sido otorgado a una persona latinoamericana y solo cuatro mujeres lo habían conseguido antes en la historia.
Recibió finalmente el Premio Nobel de Literatura de manos del Rey Gustavo, el 10 de diciembre de 1945. La Academia ponderó su lirismo inspirado por un vigoroso sentimiento que alzó a la poeta como un símbolo del idealismo del mundo latinoamericano.